Juan Jurado Ruiz

De Cordobapedia
Saltar a: navegación, buscar
Juan Jurado Ruiz
Juan Jurado Ruiz

Sacerdote. Nace en Hinojosa del Duque (Córdoba) el 2 de julio de 1906.

Desde pequeño tiene inclinación a los estudios eclesiásticos ingresando en el Seminario de Córdoba el 1 de octubre de 1918 a los doce años.

Ordenado presbítero por el obispo Adolfo Pérez Muñoz el 21 de diciembre de 1929. Su primer destino fue como coadjutor en la parroquia de San Miguel de Villanueva de Córdoba, desde donde pasa a ser ecónomo de Palenciana en el año 1933, hasta ser nombrado como párroco de San Juan Bautista -"la Catedral de la Sierra"- en su pueblo natal el 18 de enero de 1936. Se distinguió en estos años de pastor como elocuente predicador e impartir una catequesis esmerada entre los niños. Los días trágicos de la Guerra Civil le sorprendieron en esta labor. Estuvo a punto de ser prendido (y fusilado) por los milicianos que recorrían aquellos pueblos. En 1938 fue llamado a filas por el ejército republicano, y pasó lo que quedaba de guerra sirviendo en la Sanidad militar-también cavando trincheras-, hasta que en la primavera de 1939 se reincorporó a su labor pastoral.

El Obispo Fray Albino lo nombra párroco de la iglesia del Salvador y Santo Domingo de Silos ( La Compañía) de Córdoba, el 3 de septiembre de 1950 llegando a tener la parroquia en propiedad mediante oposición el 8 de junio 1954. Alternaba su labor parroquial con ser profesor del Seminario en Teología Moral y práctica de confesionario entre los años 1950 y 1960. También dio clases en la "Academia Espinar".

Juan Jurado se presenta a las oposiciones para Canónigo Magistral de la Iglesia Catedral de Córdoba , obteniendo la plaza. Toma posesión de dicho cargo el 31 de enero de 1955.

Fue monseñor Manuel Fernández-Conde quien le nombra Vicario General de la Diócesis en junio de 1960, llegando a estar en dicho cargo hasta 1970 por fallecimiento del obispo. El Cabildo por mayoría absoluta le nombra Vicario Capitular-administrador de la Diócesis-, ejerciendo el cargo durante dos años hasta la llegada de monseñor José María Cirarda Lachiondo en 1972 como nuevo obispo, admitiéndole su renuncia. El mismo año fue elevado a la dignidad de Prelado de Honor de Su Santidad Pablo VI.

Su cargo de Canónigo Magistral le permitía ser consejero del Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Córdoba. Fue constante su presencia en las cofradías Romeras como consiliario, este hecho le hizo ser una persona amante de las tradiciones cordobesas.

Destacaban sus predicaciones como Canónigo Magistral, por su elocuencia y magníficas dotes como orador sagrado, dejando más de mil sermones predicados en la Catedral. Su trabajo incansable de despacho como Vicario, le hacían acreedor de su cargo y sus colaboraciones en la prensa siempre eran bien recibidas por los diocesanos.

Persona de fuerte temperamento, serio de carácter, recto cumplidor y ordenado en sus actos; su figura vestida a la vieja usanza daba la sensación de ser profundamente piadoso. Presto a servir a la Iglesia desde el puesto que le tocó vivir en cada momento.

Haciendo alusión al sermón que desarrollo en la Catedral de Córdoba con motivo de la apertura del Concilio Vaticano II, se expone en una pincelada la forma elocuente, firme y dramática de su predicación. Comenzaba diciendo:

  • "¡¡ Los Imperios sucumben !!. ¡¡ Los Reinos caen!!. ¡¡ Las Naciones desaparecen !. Pero la Iglesia de Cristo, ¡¡ jamás desaparecerá !!......"

Muere el 16 de enero de 1984 tras una breve enfermedad. Su sobrino, el historiador Juan José Primo Jurado escribió una completa biografía, publicada por la Obra Social y Cultural de CajaSur.

Principales editores del artículo

Valora este artículo

2.2/5 (9 votos)