El Trabajitos
El Trabajitos
Era un personaje de los años cuarenta que ambulaba por la calle de la Plata y se le veía en el Bar Negresco, Bar Plata, Bar Imperio. Se dedicaba a ser corredor de casas, cerdos y cereales. Era de complexión gruesa y de edad madura, se le veía con una carterilla debajo del brazo y su mirada espiadora siempre pendiente de abordar a posibles clientes con objeto de brindar y ofrecer sus diferentes productos de intercambio comercial.
Tenía fama de ser un Séneca en sus reflexiones y de trabajar poco, de ahí su nombre metafórico.
Un buen día un amigo lo abordó y le dijo: -Qué vida más “birlonga” llevar, siempre sentado y a la caza del cliente, con la satisfacción de ganar unos dineritos y ser convidado en el cierre de los tratos. Así me apunto ahora mismo tu negocio.
El hábil corredor le respondió con una de sus reflexiones: -Mira, muchos creen que se puede comer tranquilamente sin dar golpe; hay gente que piensa se pues vive por obra y milagro del Espíritu Santo. ¡Craso error! No hay nada más pesado y agotador que trabajar para no trabajar… Ves a ese limpiabotas, huyó del oficio de tornero para vivir “a sus anchas”. Y mira como se ve por los suelos. O ese otro que pasa por allí, le llaman don Facundo, le cuelgan en los bolsillos cinco o seis millones en razón a la guerra, pues su oficio anterior era vender acebuches a los arrieros. Su interés por librase del trabajo en “reata” le ha conducido a vivir angustiado y preocupado por los impuestos, las exigencias sociales de ser un nuevo rico y con el miedo de perder lo robado en el estraperlo. ¿Acaso no lleva en sus espaldas un trabajo sobrehumano?.
Aquí como ve, para no trabajar como tú dices, tengo que sudar la gota gorda para ganar unas pesetas. Hay que hablar, tratar, discutir, enfadarse, beber mucho vino para redondear el negocio, en fin, un trabajo digno de Hércules.
Terminaba diciendo “El Trabajitos” con su conversación tan locuaz: -Amigo mío, cada cual vive según su voluntad le impulse. El hombre es un animal que busca acomodo en la forma que cree conveniente; se enquista aunque sea trabajando para no trabajar.
Personaje tan senequista abundaban por nuestra tierra, cosa que nos ha distinguido de otros lugares de la variopinta Andalucía.
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- Ildelop (Discusión |contribuciones) [3]
- Rafa mar (Discusión |contribuciones) [1]