Discurso por radio de Antonio Jaén Morente (28 de julio de 1936)

De Cordobapedia
Saltar a: navegación, buscar

El día 28 de julio de 1936, el diputado del frente Popular por Córdoba, Antonio Jaén Morente, pronunció desde Radio Jaén el siguiente discurso destinado a los militares sublevados de Córdoba para que depusieran las armas.[1]. El documento es de importancia histórica ya que fue una de las razones que los sublevados en la capital de Córdoba arguyeron para declarar en días posteriores a este y otros discursos dados por radio, hijo maldito de Córdoba.

''Cordobeses

Os hablo desde aquí, incorporado a una fuerte columna que en estos momentos sale de Jaén para marchar sobre Córdoba, compuesta por bravos soldados y milicias del Frente Popular, que van a tomar la capital cordobesa.

Quiero llevar el ánimo a mis 160.000 electores, de los 160.000 cordobeses que, al dar el triunfo la República, me sacaron diputado, que el movimiento subversivo en toda España está completamente dominado, que el gobierno es dueño de la situación, que estado en los lugares de combate de Madrid, en el Cuartel de la Montaña, en Toledo, y en las cumbres de la Sierra de Guadarrama.

En todas partes hemos vencido. Y, en todas partes han vencido las tropas al lado de la República y del gobierno, y ¿sabéis por qué? porque el pueblo español entero se ha levantado en armas contra la subversión. Todos los españoles, absolutamente todos los republicanos, han aportado su ayuda a las fuerzas leales para caer sobre los pueblos que habían dominado los facciosos apoderándose de ellos y poniendo en desvergonzada fuga a los que levantaron en armas contra el gobierno legítimo de la Nación.

El ejército, cordobeses, no se ha sublevado. Quien diga eso sabe que miente. El Ejército es leal al poder constituido. Quienes se han sublevado han sido los Jefes, eso sí. Yo mismo he tomado declaración en el Ministerio de la Guerra a los sublevados de Ingenieros en el Alto del León. Los soldados pertenecientes a los Ejércitos sublevados deseaban por momentos ponerse en contacto con las tropas leales al Gobierno para resolverse ellos en contra de los Jefes y oficiales que se habían sublevado contra la República, sin disparar un solo tiro sobre los que, leales, al régimen, daban sus vidas para devolver la tranquilidad a España.

El triunfo de la causa justa sobre la rebelión va extendiéndose por toda España. EL pueblo emprende, con unos bríos de los que ni siquiera reñían la menor idea de los jefes de la sublevación, la nueva lucha por la reconquista y defienden como en otros tiempos gloriosos hizo ya, su independencia.

Debajo de cada olivo surge un fusilero del pueblo. En Madrid están formadas las milicias por más de cincuenta mil hombres y mujeres. Entendedlo bien: mujeres que, fusil en mano, vencen en madrid, en Toledo y en Guadalajara.

Sólo quedan focos rebeldes en pequeños núcleos de Córdoba, Sevilla y Zaragoza. Esta última ciudad caerá en breve en manos de las milicias y de los soldados , que no se han sublevado contra el poder legítimo del país...

Un cinturón de fuego y hierro os rodea, cordobeses. Entendedlo bien vosotros, militares rebeldes: una columna fuerte, de seis mil soldados os va a atacar llevando toda clase de armamento moderno: ametralladoras, cañones, morteros, fusiles ametralladores, granadas de mano...Dos columnas más de Levante, Murcia y Cartagena llegan en estos momentos a tierras de Jaén para rodearos. Llevamos diez piezas de 75 y de 1,5. Por último, dos columnas de milicianos compuestas de labriegos de Jaén, que se levantan también contra vosotros.

Sentimiento me produce todo esto que os voy diciendo. La aviación española, entendedlo bien, la aviación española moderna -hay una aviación moderna-, treinta aviones, sale también para Córdoba. No os queda nada, ninguna salvación a los militares cordobeses que no sea deponer las armas y entregaros, entrando de nuevo en la legalidad republicana.

Andalucía está dirigida por un general que conocéis bien todos, por un militar que en tiempos de la Dictadura fue depuesto por el General de Primo de Rivera. Diciéndonos esto, ¿para qué os voy a decir nada más?

Pero hoy más todavía: la Plaza de Córdoba, vuestra plaza, es una joya artística, pero de ningún valor militar. No tenéis murallas, no tenéis cañones. En el arte militar estáis fracasados: no tenéis cañones antiaéreos...No confiéis tampoco en repetir las campañas de Alcolea del 68, porque no podréis.

No os dirijo estas palabras para que os asustéis, yo sólo quiero que recapacites, que penséis que para vosotros la radio no tiene más que embustes; lo demuestran las noticias que constantemente está la de Sevilla, entre ellas una que llueve desmentir: en el Gobierno no está controlado ni arrollado por nadie. Y, se mantiene firme. Al frente de él hay un hombre civil, el señor Giral.

Cese vuestra rebeldía y abrazar de nuevo la República entregados a las fuerzas leales del gobierno. Yo os aseguro que si eso no hacéis el bombardeo más terrible que ha sufrido Plaza alguna lo sufrirá la de Córdoba, el bombardeo será el más terrible, en efecto, que se haya registrado después de la guerra europea.

Quiero terminar con una combinación: os hablé un hombre profundamente patriota, un español que no quiere ver correr la sangre de sus hermanas en una campaña tan descabellada como la que han comenzado los militares contra el gobierno. Óyeme revolucionario militar: ¿qué motivos has tenido para ser el parricida de la tierra cordobesa? Eres el responsable de la revolución y debes entregarte a los leales, defendiendo así la República, que es España. Entrega las armas que has levantado contra la patria y no hagas que se derrame más sangre en esta aventura. Madrid entero y todas las poblaciones que son leales al gobierno permanecen tranquilas esperando que os entreguéis. Hacerlo y no luches contra el pueblo español, que va contra la bandera levantada por los facciosos.

</div>

Referencia

  1. GORREL JAÉN, A.; GORREL JAÉN, C.; GORREL JAÉN, M.; TORIBIO GARCÍA, M. Antonio Jaén Morente. Hijo predilecto de Córdoba. Biografía Ilustrada. 2016. Página 102. Utopía Libros

Principales editores del artículo

Valora este artículo

0.0/5 (0 votos)