Historia de Lucena

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La ocupación humana de la comarca de Lucena data de épocas que se remontan al Paleolítico Inferior y Medio. Un reciente hallazgo de un conjunto de semillas en el interior de la Cueva del Ángel, en Lucena, hace sospechar que ya se consumía acebuchina, el fruto del olivo silvestre, o sus procesados como el aceite, durante el paleolítico en Andalucía.

Edad Media

Su papel en la primera época musulmana es importantísimo por ser núcleo principal de la población judía en Al-Ándalus. Se cree que estuvo habitada exclusivamente por judíos entre los siglos IX y XII y su contribución a la cultura ha sido primordial. Hubo en ella una importante escuela universitaria judía, muchos de cuyos sabios viajarían más tarde a Toledo a fundar la Escuela de traductores. De la época judía queda un elenco de pequeñas y estrechas calles en el centro de la localidad, alrededor de la antigua sinagoga, llamada la Judería (siglos IX al XI).

En 1148 la “Ciudad de los Judíos” fue invadida y arrasada por los almohades ante la negativa de aquéllos de convertirse al Islam. Los supervivientes se dirigieron hacia el norte encontrando en Toledo la tolerancia necesaria para erigir otra comunidad donde la cultura judía pudo desarrollarse en gran manera.

El poeta judío Abraham ben Meir ibn Ezra cantó en estas lamentaciones o qinoth, la terrible ruina de Lucena y la destrucción de las aljamas judías andalusíes provocada por los almohades: "Mis ojos...lloran...por la ciudad de Lucena...Cómo quedó abandonada Córdoba...No queda un solo judío ni en Jaén ni en Almería. Tampoco queda vida (judía) en Mallorca ni en Málaga. Los residuos judíos son duramente abatidos..." “El llanto de mis ojos, como llanto de avestruz, es por la ciudad de Eliossana; libre de tachas, aparte allí moró la cautiva comunidad, sin cesar hasta cumplir la fecha de mil setenta años; pero vino su día, huyó de su gente y ella quedó como viuda, huérfana de Ley, sin Escritura, sellada la Mishná, el Talmud estéril se tornó y todo su esplendor perdió...” Luego de ser una ciudad judía y posteriormente islámica, Lucena fue ganada a la cristiandad por Fernando III de Castilla en 1240, quien la donó al obispo y al cabildo de la catedral de Córdoba, quienes a su vez, la permutaron, en 1342 a doña Leonor de Guzmán, amante de Alfonso XI, por otros bienes rústicos e inmuebles en Córdoba. Tras la guerra civil, en 1371, el primer Trastámara, Enrique II, la entregó en señorío a Juan Martínez de Argote, de quien pasará a su hija María Alfonso de Argote que, al contraer matrimonio con Martín Fernández de Córdova, vinculó Lucena a los de este apellido en su rama de los Alcaides de los Donceles, permaneciendo invariablemente como avanzada castellana en la frontera de Granada hasta 1492. En 1483, Diego III Fernández de Córdoba, derrotó y apresó al último rey de Granada Boabdil (que fue encerrado durante algún tiempo en la Torre del Castillo del Moral) en la batalla de Lucena.

Siglo XIX

La Junta de Gobierno de Lucena en la Guerra de la Independencia Española contra Napoleón tuvo un destacado protagonismo.

Siglo XX

En julio de 1918 sustituyó al alcalde el primer teniente de alcalde Juan Fernández de Villalta Ramírez.[1]

Segunda República

El 7 de septiembre de 1932 apareció en un balcón del Ayuntamiento de Lucena la bandera monárquica, lo que causó un revuelo.[2] Ese día llegaba a Córdoba el presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora.

El 14 de mayo de 1934 un grupo de mujeres asalta una panadería en Lucena y roba 60 panes. El Gobernador Civil promete al alcalde obra pública para remediar la crisis.[3]

Guerra Civil

Antonio García Doblas es nombrado alcalde y presidente de la Comisión Gestora. Junto a él figuran Pedro Vela Alcalá, Fernando González Medina y Enrique Montoya Tejada.

El martes 8 de marzo de 1938 anunciaba la prensa la renovación de la Comisión Gestora municipal. En efecto, el viernes 4 de marzo cesaron tres de los gestores anteriores: Pedro Vela Alcalá, Fernando González Medina y Enrique Montoya Tejada. En su lugar fueron nombrados Pedro Nadal Francés, Francisco Algar Rojas, Abundio Ávila Fernández y Joaquín Ruiz de Castroviejo. Continuaba presidiendo la Comisión Antonio García Doblas.[4]

Transición democrática

A partir de la época democrática, Lucena comienza un rápido crecimiento económico convirtiéndose hoy en uno de los principales centros industriales de Andalucía. Sin perder su industria del sector primario (Lucena es la segunda productora de aceituna a nivel mundial tras la ciudad jienense de Martos, además de ser un importante centro vinícola de la Denominación de Origen de Montilla-Moriles), Lucena es hoy la segunda productora de muebles del país tras Valencia y la primera productora de frío industrial (80% de la producción nacional), entre otras industrias.

Referencias

  1. Del Gobierno Civil. Interinidades, en el Diario de Córdoba, 30 de julio de 1918, pág. 1.
  2. En Lucena, en el diario La Voz, 7 de septiembre de 1932, pág. 10.
  3. Gobierno Civil, en el Diario de Córdoba, 17 de mayo de 1934, pág. 1.
  4. Nueva gestora municipal, en el Diario de Córdoba, martes 8 de marzo de 1938, pág. 1.

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