Asociación Cultural "La Judea Populus Iudici"
Se tiene constancia que en el siglo XVII, la Hermandad de Ntro. Padre Jesús Nazareno incorpora a su desfile la figura del judío, siendo sus primeros rostros de cartón. Durante estos años las representaciones de la Pasión con distintas figuras o personajes, entre los que se encontraban judíos, Pilatos, etc., eran muy criticadas por los responsables de la Diócesis cordobesa, los cuales quieren suprimir estas representaciones, a pesar del fuerte respaldo popular que tienen en Iznájar, por ser irrelevantes y contrarias a un fervor auténtico.
El edicto del Prelado Miguel Vicente Cebrián prohíbe las representaciones de la Pasión y los distintos personajes que salen en las procesiones. En Iznájar hay un rechazo frontal al polémico edicto y haciéndole caso omiso a tal edicto, los iznajeños continúan con su Semana Santa, con sus representaciones y cada uno de sus personajes en las procesiones.
Así, el Prelado Martín de Bercia, el 21 de Marzo del 1765, ordena al Vicario de la Villa que recoja de inmediato el atuendo de judíos y demás figuras bíblicas. Pese a tal prohibición y retiradas las ropas, la Semana Santa de Iznájar sigue manteniendo sus tradiciones barrocas. Fue a principios del siglo XIX, el Obispo Pedro Antonio de Trevilla quien lucha de forma denodada por hacer desaparecer las costumbres arraigadas en la Semana Santa Iznajeña. Si en un principio no consiguió su objetivo por la resistencia de las autoridades municipales, consigue la supresión de las procesiones y representaciones en el año 1818, tras acudir el Obispo Trevilla a la Chancillería de Granada, la cual obligó a los representantes del Ayuntamiento y a la Justicia local a hacer cumplir los mandatos del prelado. Todo esto tendría efectos perniciosos y desastrosos para la Semana Santa de Iznájar.
En 1819 y tras la petición del Vicario de la Villa Joaquín Tirado y Pastor a la Diócesis Cordobesa, vuelven a salir 3 procesiones pero sin personajes, ni representaciones de la Pasión. Todo esto marca un periodo de decadencia de la Semana Santa, que se alargará hasta el último cuarto del siglo XIX, en el que se recuperarán las Representaciones de la Pasión y las figuras de los Judíos, Romanos y Apóstoles, como se pueden ver en los estatutos elaborados en Abril de 1907 de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
La Judea estaba en 1907 integrada dentro de la Cofradía del Nazareno, la colocación de la Judea en la Procesión era a la autoridad del Hermano Mayor o la de aquel que en cada caso ortogare la costumbre para la dirección del acto. La cuota de cada uno de los miembros que componían La Judea ascendía a 25 céntimos al año. La Judea tenía su representación dentro de la Junta de Gobierno de la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno. Estaba representada en esos años por un número ilimitado de varones mayores de 17 años, siendo su figura principal Poncio Pilatos. Tenían que cumplir obligatoriamente con la práctica sacramental el Jueves Santo, participar en la representación de la Pasión y en las Procesiones de Semana Santa.
En estos años en que La Judea estaba integrada dentro de la Cofradía del Nazareno, el que hacía de cabeza o tenía el mando era el que figuraba como Poncio Pilatos, a quien seguían dos consejeros y un número indeterminado de Judíos. Para pertenecer a La Judea era requisito indispensable ser de Religión Católica Apostólica Romana y tener cumplidos los 17 años. Sus actos comenzaban el Jueves Santo, continuando el Viernes Santo y Sábado de Gloria, este día asistían también a la última Procesión que hay costumbre desde tiempo inmemorial que la presida el cabeza de La Judea, Poncio Pilatos, para conducir las Imágenes desde el Templo Parroquial a su Ermita llamada de La Antigua, estando obligados los Judíos a llevar a la mano la Imagen de Jesús Nazareno.
Tras varios años de altibajos, llegándose incluso a desaparecer La Judea, fue en el año 1984 de la mano de Antonio Quintana Jiménez, Antonio León García y Juan Antonio Sánchez Ferreira; cuando se recuperó definitivamente La Judea. Ese año salió de Pilatos Juan Antonio Sánchez Ferreira, ya que por tradición familiar su padre Don Juan Sánchez salía de Pilatos en los años sesenta, con un rostrillo. Al desaparecer el rostrillo, Pilatos salía con gafas de sol, actualmente sale con la cara descubierta. Igualmente recuperaron las ropas, rostros y demás aderezos. Las ropas fueron pagadas por el Ayuntamiento siendo Alcalde Don Manuel Llamas San Juan.
Actualmente es una Asociación Cultural, el nombre completo de la Asociación es; “ASOCIACIÓN CULTURAL LA JUDEA POPULUS IUDICI”. La componen 101 miembros entre hombres, mujeres, niños y niñas, se rigen por unos estatutos de reciente creación. No tienen cuartelillo fijo, ya que en los últimos 7 años han tenido diferentes cuartelillos, según fuera el sitio que le adjudicara el Ayuntamiento. Actualmente tiene su cuartelillo en la calle Lanzas Torres, junto a la Cámara Agraria, en este cuartelillo, se realizan las reuniones, comidas de Hermandad, se restauran ropas, rostros, morriones, etc. La Judea tiene un miembro de Honor, en el año 2007 fue elegido MESILLA DE HONOR a Don Raimundo Ropero, por su dedicación, devoción y amor a la Judea.
La Judea participa en las Procesiones del Lunes Santo, Miércoles Santo, Jueves Santo, Viernes Santo por la mañana en la Procesión del Nazareno y Viernes Santo noche en el Santo Entierro. Hay que destacar que La Judea es cofrade fundador de la Cofradía del Cristo de la Buena Muerte y San Juan Evangelista, portando un Judío al Cristo. El Viernes Santo es el día importante de La Judea, en la Procesión del Calvario, donde se pregona la Justicia, La Sentencia, se juegan los dados, corren los maladrones detrás de la chiquillería y se realiza la reverencia al Nazareno en cada una de sus tres caídas. Por la noche en el Santo Entierro los Judíos se culpan unos a otros hasta que llega el turno de Poncio Pilatos, el cual se lava las manos. Además de los desfiles procesionales de la localidad, también han participado en Concentraciones Romanos-Judías como es el caso de las llevadas a cabo en Alcalá La Real (Jaén), Noguerones (Jaén) e Iznájar (Córdoba). Igualmente ha colaborado en la exposición de Semana Santa celebrada en el 2007 en Pozoblanco con motivo del centenario del Nazareno de esa localidad
El atuendo es pintoresco e inspirado en el traje tradicional de la gente del pueblo en la época en que se fundó. Los personajes que conforman La Judea son Poncio Pilatos, Prócula o Procla, Moñitos, Mesillas, Sayones, Jugadores de Túnica, Separtaor, Pregonero, Tiraor, Capitán, los Judíos y los Maladrones.
Pilatos es el que preside La Judea en todas las procesiones en las que participa. Su vestimenta está compuesta por túnica verde de terciopelo con adornos en el cuello y mangas, estola verde, sandalias rojas, medias, peluca rizada, corona de laurel, mascaron colgado del cuello y vara de mando entre sus manos.
Prócula o mas conocida en Iznájar con el nombre de Procla, es la esposa de Poncio Pilatos y va acompañándolo en todas las procesiones. Su ropa suele ser prestada por la Directiva de “El Paso”, típica de la época de la mujer Romana en la que transcurrieron la Pasión y Muerte de Jesús.
Los Moñitos son los dos consejeros y escribas de Pilatos. Acompañan al Procurador en las Procesiones y son los encargados de portar los pregones de la Sentencia y la Justicia que dictó este. Su ropa consiste en túnica de color verde oscuro con adornos plateados en cuello y mangas, capa larga roja, cordón rojo por la cintura, sandalias rojas, medias, pelucas con sus pequeños moños y vara de mando más pequeña y fina que la de Pilatos.
Los Mesillas representan a los esclavos encargados de portar los dados y la mesilla donde los Judíos se juegan la túnica de Jesús de Nazaret el Viernes Santo en la Procesión del Calvario. En la noche del Viernes Santo portan una toalla blanca y una palangana, en la que Pilatos se lava las manos. Su ropa consiste en pantalón por debajo de la rodilla granate con flecos blancos, blusón granate con la estrella de David en dorado en el pecho, cordón amarillo por la cintura, medias y sandalias rojas.
Los Sayones representan a los cuatro verdugos que flagelaron a Jesús, en las procesiones van custodiando a la Imagen del Cristo. Su ropa la compone un pantalón por los tobillos y blusón granate de terciopelo con adornos dorados en el pantalón y mangas, morrión de flores de colores mas alto que el resto de los Judíos terminado con plumas de pavo real, orejeras con adornos dorados, sandalias rojas, medias blancas, rostro negro y zarzas en las manos.
Los Jugadores de Túnica son los dos Judíos que se juegan a los dados la Túnica de Jesús Nazareno el Viernes Santo por la mañana. Su ropa está compuesta por pantalón granate por debajo de la rodilla con flecos blancos, blusón morado, fajín amarillo con flecos blancos, media capa azul, sable, rostro, sandalias rojas, medias blancas, cintas de colores en la cabeza y morrión de flores de colores. El Viernes Santo por la mañana llevan un trozo de tela morado uno de ellos, que representa la Túnica de Jesús, esta tela pasa de un jugador a otro cada vez que se la juegan. El Separtaor es otro de los Judíos que participa en el juego de la Túnica y hace de juez en caso de disputa entre los dos jugadores. Su ropa es igual que la de los jugadores.
El Pregonero es el encargado de cantar la Justicia y leer la Sentencia dictada por Poncio Pilatos. Algunas veces sale un pregonero, pero como norma general son dos los pregoneros que procesionan, uno lee la Sentencia y el otro la Justicia. Su ropa está compuesta por pantalón granate por debajo de las rodillas con flecos blancos, blusón morado, fajín amarillo con flecos blancos, sandalias rojas, media capa azul, daga, medias blancas, morrión con flores de colores, cintas de colores en la cabeza y rostro, aunque el Viernes Santo por la mañana el Pregonero no procesiona con rostro, igualmente ese día porta la Sentencia o la Justicia.
El Capitán dependiendo de los Judíos que procesionen ese día son uno o dos, su misión consiste en mantener a los Judíos organizados y procurar que guarden la formación correcta. Su vestimenta la compone pantalón granate por debajo de la rodilla, fajín amarillo con flecos blancos, blusón morado, media capa azul, sable, medias blancas, sandalias rojas, rostro y morrión con flores de colores y cintas de colores en la cabeza.
Los Judíos representan al pueblo judío en las procesiones, van colocados por parejas uno a cada lado de la calle, su ropa está compuesta por pantalón por debajo de la rodilla granate con flecos blancos, blusón morado, fajín amarillo con flecos blancos, cintas de colores en la cabeza, morrión con flores de colores, sandalias rojas, medias blancas, media capa roja y rostro. Uno de ellos porta el estandarte de la Asociación, el portador del estandarte lleva capa azul y daga. El estandarte es morado con flecos granates con un dibujo central de dos judíos con sus morriones y rostros en el centro, en su parte alta va escrito “La Judea” y en su parte baja “Iznájar”. Fue pintado y confeccionado por Juan Antonio Llamas Sánchez y Antonia Sánchez Ferreira en el año 1996. El estandarte va en cruceta de madera.
El tiraor es el Judío que sujeta la cuerda con la que van amarrados los dos maladrones. Su ropa está compuesta por pantalón granate por debajo de la rodilla con flecos blancos, blusón morado, fajín amarillo con flecos blancos, sandalias rojas, medias blancas, media capa azul, daga, rostro, cintas de colores en la cabeza y morrión con flores de colores.
Los maladrones representan a los dos malhechores que fueron crucificados el mismo día junto a Jesús de Nazaret, el Viernes Santo se le canta La Justicia y al finalizar La Justicia salen corriendo detrás de los chiquillos. En el Santo Entierro no van atados ni llevan las cruces en sus manos, sino que portan cada uno una Cruz grande negra con una estrella de David pintada en dorado en la cruceta de la Cruz, en signo de penitencia por sus pecados. La vestimenta del maladrón está compuesta por túnica granate por debajo de las rodillas, fajín amarillo con flecos blancos, rostro con coletilla (uno negro para el mal ladrón y rostro blanco para el buen ladrón), sandalias rojas y una cruz en sus manos.
Hay que destacar en La Judea sus rostros, que suelen ser narigudos, oscuros y barbinegros que acentúan la fealdad de espíritu de los supuestos culpables de la Pasión y muerte de Jesús. Igualmente tenemos que destacar su juego de túnica, lecturas de sentencia y justicia, las carreras de los maladrones, sus reverencias al Nazareno y como la noche del Santo Entierro de Jesús Nazareno se culpan y se exculpan los Judíos con el “TÚ, TÚ, YOOO, YO NÓOOO. ATRÁS QUEA” y cuando la culpa le llega a Pilatos, este dice “YO ME LAVO LAS MANOS Y ALLÁ VOSOTROS”.
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