Revista de Feria (Cerro Muriano)

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Portada de la revista de Feria de 2101.

Esta Revista de Feria es un publicación anual que se realiza en Cerro Muriano con motivo de la Feria.


Revista de 2010

Algunos textos de la revista de 2010 son:


LA FERIA, LA CASETA Y LA CERVEZA

En un papel inexistente
escribo con tinta roja invisible,
aquello que se me ocurre
y pasa por mi mente,
para hacer un poema legible
que entienda toda la gente.

Desde las raíces profundas de mi ser,
la palabra fluye, mana,
y porque la siento nacer,
la adorno con filigrana.

En feria Cerro Muriano se viste de oro y plata,
con luz dorada del sol del mediodía,
con luz blanca de la luna de la noche,
y tiene por ropa interior
gentes de cobre y bronce,
que bailan con destreza,
y de elegancia hacen derroche,
en plena naturaleza.

Es un ir y venir,
un entrar y salir,
donde estas y no estas,
de alma presente y ausente,
de paz y ajetreo,
te veo y no te veo,
y en todo momento,
la gente sale, la gente entra,
todos de la caseta,
sólos o en pareja,
jóvenes y hasta una vieja,
todos con la lata de cerveza.

La gente sale, la gente entra,
ríen, cantan y bailan,
Cerro Murino está en feria,
y entre tanta ligereza
una lata de cerveza.

Rafael Centeno López



FIESTA EN EL BOSQUE

Estoy bailando al ritmo de la melodía, con tambores, guitarras modernas y cantos de hoy en día.
Mi cuerpo agitado y sudoroso, empieza a dejar paso al pensamiento.
De pronto pasa por mi cabeza la imagen de una fiesta celta en el interior de un bosque de Europa.
Todos comen, beben y bailan al son de los instrumentos musicales de la época.
Vuelvo a la relidad y también yo me veo inmerso en una fiesta de un Bosque de Europa, un bosque de Sierra Morena, en Cerro Muriano, una aldea, un pueblo y un lugar donde habita el hombre, y donde éste conforma una tribu que ahora está en feria.
Una fiesta de una sociedad tribal, abierta a todos los hombres de otras tribus que quieran participar. Todo ocurre en el interior de una inmensa alfombra verde, de diversa flora, de pinos, de encinas.
También hay cientos de animales en derredor que nos observan, mientras nosotros nos divertimos y nos dejamos llevar por los druidas del conjunto de música que actúa sobre el escenario.
Todos nos encontramos en medio de un ritual de música, bebida, comida, etc..., dando gracias a Dios o a los dioses por permitir que un año más nos hayan dejado celebrar nuestra feria.
Una fiesta de una tribu del siglo XXI en un bosque de Europa.

Rafael Centeno López

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