Antonio Navajas Moreno
Antonio Navajas Moreno (*Castro del Río, c. 1875) - †1936), propietario agrícola y miembro del Partido Agrario, fue alcalde de Castro del Río en la primera década de 1900.
Biografía
Casado en 1899[1] con Isabel Rodríguez Carretero (†1910), tuvo varios hijos (Antonio, Augusto, Mateo y José)
Fue alcalde de Castro del Río por los conservadores durante la primera década del siglo XX, y figura destacada de la patronal agrícola de Castro del Río, asiduo e inflexible interlocutor con los obreros sindicalistas en las negociaciones de las bases de trabajo. Después de los agitados y conflictivos años del trienio bolchevista (1918-1920), promotor y acérrimo defensor del sindicalismo católico agrario, con el que contrarrestar, en lo posible, la creciente influencia de aquellos llegando a ofrecer tierras propias en subarriendo al mismo precio que él las tenía a los más de 300 colonos[2]
Durante la Dictadura de Primo de Rivera coquetearía con la Unión Patriótica (partido único).
II República. Diputado por el partido Agrario (1933-1935)
Con la llegada de la II República y durante el primer bienio republicano ostentaría la presidencia de la Federación Provincial de Agricultores de Córdoba, lo que le resultó de gran ayuda para proyectarse políticamente. A la segunda y definitiva vuelta de aquel proceso electoral concurre con la etiqueta de agrario, formando parte de la coalición de centro derecha antimarxista (Acción Popular, Partido Republicano Radical, Republicano Progresista y Agrarios) que resulta vencedora.
Con motivo del asesinato de Gaspar Zurita Romero en septiembre de 1933 elevó una protesta al gobierno de la nación. Fue diputado en el bienio 1933-1935 por el Partido Agrario.
Fue llamado mocetón y paletón por sus hechuras y costumbres un tanto campestres o pueblerinas. Físicamente era un hombre grande y fuerte colocadas por un famoso columnista de La Voz (Dick) al divulgar su costumbre de concurrir al Congreso de los Diputados con alforjas camperas, de las que se proveía de viandas a corte de navaja, mientras que la mayoría de los diputados de provincias aprovechaban las sesiones del Congreso para visitar los mas afamados restaurantes de Madrid. Renunció al acta antes de acabar aquella legislatura.
El apelativo de “barbitas de alambre” se lo colocaron en las primeros años del siglo, cuando siendo alcalde o presidente del “Circulo de Labradores” adquirió una bomba con la que atajar los incendios fortuitos o provocados en los predios y almiares. Como el artefacto debía de ser bastante rudimentario y difícil de poner en marcha (tal vez nadie quiso aprender a utilizarlo, por los riesgos) él mismo, con su recia barba, se hacía cargo personalmente de la extinción de los incendios. De tanto vanagloriarse de su actitud heroica y de su inmaculada barba sin chamuscar, le viene el calificativo con el que el pueblo le bautizó.[3]
En mayo de 1935, el diputado Navajas vuelve a la disciplina del grupo, según anunció Martínez de Velasco. Lo hizo a través de una carta a Royo Vilanova, mostrándose identificado con el partido agrario.[4][5] Pero en abril de 1936, Navajas Moreno se separó nuevamente del Partido Agrario y envió sus explicaciones a la prensa.[6]
Estallido de la Guerra Civil y muerte junto a sus hijos
Desde el 19 de julio de 1936, Antonio, junto con tres de sus hijos, Augusto, Mateo y José, y un hijo político, se refugiaron en el Cuartel de la Guardia Civil de Castro del Río, resistiendo el asedio de las milicias locales. El 23 de julio, en un episodio confuso entre rendición y posible huida premeditada, Antonio y su hijo José, de solo 16 años, perdieron la vida. Augusto y Mateo consiguieron escapar en medio de la confusión.
Posteriormente, tras la muerte de Augusto, quien se había unido a las filas del ejército nacionalista, Augusto y Mateo Navajas enviaron un telegrama desde Montilla comunicando la trágica noticia a su hermano Antonio Navajas Rodríguez-Carretero, quien se encontraba en Córdoba y se había alineado con la defensa de la legalidad republicana desde el comienzo del conflicto.
La versión inicial sobre la muerte de Don Antonio, reflejada en el telegrama, señalaba que había sido asesinado en la plaza pública por "turbas criminales". Sin embargo, informes posteriores y reseñas de prensa presentaron narrativas alternativas, incluyendo una en la que se sugiere que cuando intentaba refugiarse fue delatado y asesinado al tratar de cruzar unas huertas.
Una tercera versión, revelada durante un Consejo de Guerra celebrado en Córdoba en diciembre de 1937, detalla que fue llevado al cementerio y atacado brutalmente. A pesar de sus súplicas por ayuda, el sepulturero, involucrado en el asesinato, lo remató con un hacha.[7]
El papel de su hijo durante el levantamiento militar
Fue padre de Antonio Navajas Rodríguez-Carretero, teniente de la Guardia de Asalto en la Segunda República que se encontraba en el Gobierno Civil de Córdoba, bajo el mando de capitán Manuel Tarazona Anaya durante los hechos ocurridos el 18 de julio de 1936. Junto a su jefe, se posicionó en la defensa de la legalidad republicana, no así sus otros dos compañeros también tenientes Villalonga y Galiani, que ayudaron a los sediciosos. Terminada la toma del Gobierno fue detenido y encarcelado junto a su jefe el capitán Tarazona, que sería fusilado mientras que este no.
Más adelante, fue llevado Antonio en la expedición a Castro del Río para así redimir su falta de adhesión a los sublevados. Al no poder entrar en la localidad el general Varela volvió a Córdoba y a Antonio Navajas se le aplicó una pena de prisión militar por varios años.[8]
Predecesor: ' |
Alcalde de Castro del Río 1900 - 1904 ?? |
Sucesor: ' |
Referencias
- ↑ El defensor de Córdoba : diario católico: Año I Número 55 - 1899 noviembre 7
- ↑ Intolerancias: la Semana Santa de Castro del Río de 1920. Blog De Castro ero y bailar no sepo. 19 de abril de 2014
- ↑ “Letrillas de agitación popular” (Carnavales en Castro del Río durante la II República). 1 de marzo de 2011
- ↑ Reingreso de un diputado en la minoría agraria, en el diario La Voz, 17 de mayo de 1935, pág. 8.
- ↑ Reunión de la minoría agraria, en el diario La Voz, 17 de mayo de 1935, pág. 8.
- ↑ El diputado Sr. Navajas se separa del partido agrario, en el diario El Defensor, 17 de abril de 1936, pág. 2.
- ↑ La suerte de Don Tancredo. Blog De Castro ero y bailar no sepo. 22 de octubre de 2013
- ↑ Telegramas de protesta por el asesinato de don Gaspar Zurita Romero, en el diario La Voz.
Principales editores del artículo
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