Molino del Corregidor

Es un molino reconvertido en casa de campo, de ahí que se conozca también como Casa del Corregidor. Los cambios que se han producido en la fábrica, a raíz del abandono de la actividad productiva, apenas han tenido más repercusión notable que el desarrollo del señorío. Éste muestra una imagen verdaderamente noble, con un gran edificio de notable volumetría e incluso con escudos de armas en la fachada a la calle.

En su conjunto mantiene la estructura, con dos patios separados por una verja y tres sectores funcionales: la vivienda, la almazara y las demás dependencias accesorias. El primer patio, que se extiende tras la verja de entrada, es de servidumbre del señorío, que ocupa toda la crujía de oriental, así como de las habitaciones del casero, que limitan dicho espacio por el fondo. Uno de los accesos a la almazara se produce desde este patio, aunque la puerta principal se sitúa en el otro patio, el de labor. Este espacio productivo se organiza en dos naves, la que permitía el trabajo de la viga, hoy señalado por la capilla de la torre, y la paralela, con la bodega. Dos arcos establecen la separación, uno de mayor amplitud que el otro. Junto a la almazara se disponen otras dependencias asociadas a la tarea agropecuaria, como las cocheras y las cuadras.