Camará II
| Rafael Sánchez Sánchez | |
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Torero | |
| Nacimiento: | 1902 Córdoba |
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| Fallecimiento: | 1980 Córdoba |
Contexto histórico | |
| Décadas: 1920 - 1930 - 1940 - 1950 - 1960 - 1970 | |
Rafael Sánchez Sánchez (Córdoba, 1902 1980), torero conocido como Camará II, padre del también torero Rafael Sánchez Saco.
Biografía
Nace en Córdoba el 18 de julio de 1902. Desde muy joven se aficionó al toreo y su primera actuación como novillero la tuvo en Cabra alterando con José Ojeda. Su presentación en Córdoba fue el 1924 en calidad de sobresaliente. Desde entonces no le faltaron novilladas.
Actuó por primera vez en Madrid el 26 de agosto de 1928, lidiando novillos de Netto Revelo, en compañía de Alfonso Gómez Finito de Valladolid y Ángel C. Carratalá. Rafael obtuvo un existo clamoroso al ser sacado a hombros. Algún crítico madrileño lo comparó con el torero Rafael González Madrid Machaquito, otro con esta frase: Camará, con Camará o esta otra: Las tres V de Camará, valor ,verdad, voluntad. Esta actuación le abrió camino para actuar en diferentes ruedos, formando cartel con destacados novilleros de su época, entre plazas que toreó estuvo la de Barcelona, Cádiz y Córdoba, en esta última se presentó muchas ocasiones en noble competencia con su cuñado Rafael Saco Rodríguez Cantimplas.
En 1930 ejecutó una buena temporada en toda España marchando a América al obtener varios contratos. Pensó tomar la alternativa en 1932, pero empezó a decaer su cartel, a no serle propia la suerte, hasta el punto de verse obligado abandonar los ruedos. Actuó de sobresaliente con Antonio Cañero Baena en 1934. En Tenerife, donde fue corneado el rejoneador, tuvo que matar al morlaco.[1]
Acuciado por la necesidad económica se dedicó como agente comercial a los negocios.
Como lidiador fue castigado con varias cornadas dos de ellas de gravedad como fue en Fuente Génove (Jaén) y en Salamanca, esto no fue motivo para mermar su valor.
Su toreo derrochó valor y voluntad, aunque no fue un lidiador fino, si alcanzó a ser un matador excelente, pues echaba carne abajo con sus estocadas fulminantes.
Rafael Sánchez contrajo matrimonio con una hija del que fuera banderillero Manuel Saco de León "Cantimplas". Tuvo cinco hijos toreros todos con cualidades para la profesión, entre ellos Rafael Sánchez Saco que malogró su carrera a consecuencia de una la grave cogida.
Aficionado hasta su muerte al mundo del toro dijo en más de una ocasión esta frase: A mis años soy capaz de darle un quiebro a cuerpo limpio a cualquiera de los becerros que ahora se lidian.
Toda la vida le acompañó su amor propio, tanto como torero, así como en su trabajo por su rectitud y caballerosidad.
Falleció el 13 de enero de 1980.
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