HOAC

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Antonio Navarro y la HOAC de Córdoba

La Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) es un movimiento asociativo de la Iglesia Católica especializado en el mundo obrero, de ámbito estatal, integrado en la Federación de Movimientos de Acción Católica. Impulsado por la Iglesia Católica, el objeto y fines de la HOAC es la evangelización del mundo obrero de acuerdo con la finalidad y características de la Acción Católica Española. Tuvo su sede en calle Armas, número 12, de Córdoba.

Formada por hombres y mujeres que han decidido vivir la fe y el seguimiento a Jesucristo en las condiciones de vida y trabajo del mundo obrero, en los sectores más débiles y empobrecidos, una de sus tareas fundamentales es formar, orientar y sostener militantes obreros en un proyecto evangelizador. De aquí la importancia que tiene la formación, entendida como el logro progresivo de un modo de ser, de pensar, de sentir, de actuar y de vivir profundamente cristiano.

Historia

La HOAC nace en 1946 como Movimiento Apostólico de la Acción Católica con la misión de hacer presente a Jesucristo y a su Iglesia en el mundo obrero. Desde sus orígenes ha intentado vivir unidas la fe cristiana y la vida obrera. La HOAC nació de la voluntad del Papa Pío XI de extender la Acción Católica al mundo obrero. En España la puso en marcha Guillermo Rovirosa, llegando a Córdoba en 1946.

Hermandad de San José Obrero

En 1946 el obispo Fray Albino organizó unos ejercicios espirituales abiertos de todas las parroquias cordobesas. Estos ejercicios fueron dirigidos por los dominicos con una gran afluencia de fieles. A raíz de ello, Juan Font del Riego, que acababa de salir del seminario, reunió a una serie de trabajadores de la RENFE, del Ayuntamiento, de Automovilismo y formó un grupo que culminó en la creación de la Hermandad de San José Obrero. La presidencia de esta Hermandad recayó en Rafael Posadas, célebre ebanista cordobés, quedando como Consiliario el propio Juan Font. Esta hermandad fue el germen de la HOAC en la diócesis cordobesa, que contó con prestigiosos militantes, como Diego Delgado Martín, Juan Calvo, Lola Castilla o Francisco Povedano Cáliz, presidente en dos períodos, o su consiliario durante muchos años, Antonio Navarro Sánchez.

Primeros miembros

Entre los primeros miembros de HOAC en Córdoba podemos citar a Rafael Posadas, presidente en 1946, y los vocales Antonio Cantarero Villar, Juan Antonio Rebollo Severo, Miguel de la Rosa y Luis Montoro. Hacia 1954 la primera CD fue modificada en parte y ampliada quedando así:

XI Semana Nacional
Cursillistas HOAC, c. 1960

Celebrada en la capital cordobesa del 9 al 15 de septiembre de 1956 con la participación de 300 delegados y delegadas, la XI Semana Nacional de la HOAC, con la presencia del Obispo Fray Albino o la del canónigo Juan Font del Riego, tuvo como hechos clave la asistencia de delegados de la FIMOC (Federación Internacional de Movimientos Obreros Católicos) y la celebración de sesiones conjuntas, por primera vez, con la I Semana Nacional de la HOACF (Hermandad Obrera de Acción Católica Femenina) para tratar temas como el de la familia o el mantenimiento del hogar. Como anécdota, la oposición del padre Cuenca a que se celebrase en el Seminario de San Pelagio.

Hacia 1960 forman parte de HOAC los sacerdotes Antonio Navarro Sánchez, José Ramírez, Valeriano Orden Palomino, Bartolomé Blanco, párroco de Cañero, Juan Moreno Gutiérrez, Domingo García Ramírez, Paulino Ortiz Molina. Entre los seglares están: Diego Delgado Martín, Juan Antonio Rebollo, Manuel Figueroa, Antonio Cantarero Villar, etc. y entre las mujeres Lola Castilla y Paz Millán.[1]

Crisis interna

A medida que los militantes de la HOAC de Córdoba iban creciendo en conciencia, también iba aumentando su compromiso con el mundo del trabajo. Su acercamiento a los comités de empresa de la época de las principales industrias cordobesas, así como su militancia en el sindicato CC.OO. dio paso a la firma de los primeros convenios colectivos y el fomento de actividades de formación encaminadas a crear conciencia en las bases trabajadoras del sistema social injusto en el que estaban inmersos y de la necesidad del cambio. Esta etapa fue conocida como “el compromiso temporal”, y tuvo repercusiones importantes fundamentalmente por el progresivo recelo de las autoridades civiles y la policía, lo que provocó no pocos momentos de tensión, al margen de la vigilancia casi constante a que se sometió a los militantes de la HOAC y a la propia organización. Con motivo de las ejecuciones del proceso de Burgos hubo movilizaciones y manifestaciones, con escritos públicos de repulsa. La Navidad de 1970 fue un momento clave, con la detención de Diego Delgado y del médico Balbino Povedano Ortega.

Suspensión

Las autoridades recomendaron a la Iglesia Católica echar el cierre de su hermandad y suspendieron la publicación ¡ADELANTE!; además se suspendieron los actos y las reuniones, en especial la conmemoración del 1º de mayo de 1971, que la HOAC quería celebrar multitudinariamente en el Gran Teatro de Córdoba. El mismo día de la celebración los llamados “grises” rodearon totalmente el Gran Teatro y no permitieron el acceso a nadie. El acto fue suspendido por el Gobernador Civil.

Nueva etapa

Con la llegada de la Democracia, hacia 1976 se retomaron los trabajos y el impulso de la HOAC, que tomó una posición equidistante entre los nuevos sindicatos y partidos políticos y le tarea diocesana.

Presidentes de HOAC

Enlaces externos

  • ↑ Aproximación a la historia de la HOAC de Córdoba, en la web http://hoacdecordoba.es.

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