Rafael Blanco Criado

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Rafael Blanco y Criado

Poeta

Nacimiento: 1823
Córdoba
Fallecimiento: 1900
Córdoba
Profesion: Farmaceútico y escritor
Actividad: Académico

Contexto histórico

Décadas: 1850 - 1860 - 1870 - 1880

Rafael Blanco Criado fue un farmacéutico, literato y poeta cordobés de la segunda mitad del siglo XIX.[1]

Biografía

Nace en 1823 y tras estudiar en San Pelagio, obtiene el título de Bachiller en la Universidad de Sevilla, y el de Farmacia en Madrid, comenzando a ejercer en el año 1850 en la ciudad de Córdoba. Ejerce varios cargos tanto públicos como concejal en el Ayuntamiento de Córdoba (1856) como periodístico (redactor de revistas farmacéuticas o periódicos locales).

Académico numerario desde 1863, es autor de una colección de leyendas aparecidas bajo el título de Antiguallas en el Almanaque del Diario de Córdoba.

En su memoria, mantiene una calle en Córdoba con el nombre de calle Poeta Blanco Criado. Falleció en el año 1900

El señor Blanco, persona conocida y estimada en Córdoba, de gran ilustración y acendrados sentimientos religiosos, nació en la ciudad que guarda sus restos, el dia 27 de Junio de 1823.
Estudió en ella la primera enseñanza y Filosofía, como alumno externo del Seminario Conciliar de San Pelagio: obtuvo el grado de Bachiller en la "Universidad de Sevilla, y en Madrid cursó la carrera de Farmacia que empezó á ejercer en Córdoba en el año 1850.
Gran aficionado al estudio de las ciencias y la literatura, cultivólas con fortuna, como lo prueban sus innumerables artículos sobre higiene, asuntos de farmacia, descriptivos de costumbres populares, sus cuentos, poesías, publicados en la revista madrileña Restaurador farmacéutico y en los periódicos de Córdoba, La Tradición, El Antídoto, La Crónica, el Diario Córdoba y otros.
De las varias contiendas entre escritores, en que intervino, recordamos las motivadas por la demolición del convento de la Victoria y de la casa de los Bañuelos, que le inspiraron donosos escritos, los cuales vieron la luz en la prensa, firmados con pseudónimos.
Actuó de jurado en varios Juegos Florales de esta capital, y en unos de ellos, los del año 1872, obtuvo un premio por su poesía titulada Excursión á las Ermitas.
La Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba, de la que era sócio de mérito, le encargó la recopilación de las obras del escritor agüilarense don Rafael de Vida Quesada, trabajo que realizó muy discretamente, prologándolas con gran acierto.
De su labor literaria solo queda, amén de las producciones esparcidas en la prensa, que son flores de un día, un sentido canto en octavas reales á los Patronos de Córdoba San Acisclo y Santa Victoria, impreso en un folleto.
En el año 1856 ejerció el cargo de concejal del Excmo. Ayuntamiento y, entre otros varios, desempeñó en distintas ocasiones los de Subdelegado de Farmacia del distrito de la izquierda, vocal de la Junta provincial de Sanidad y de la municipal de Instrucción pública y juez de las oposiciones á las plazas de farmacéuticos de los hospitales de Agudos y Crónicos.

Referencias

  1. DE MONTIS, R.. Almanaque del obispado de Córdoba: Año 1901 - 1901. Página 126.

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