CNT

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La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) es un sindicato de ideas anarquistas que aspira a la transformación de la sociedad española a través de la acción colectiva y solidaria de los trabajadores. La CNT no confía en los partidos políticos ni en la representatividad de las instituciones, por lo que no participa en las elecciones sindicales y pide la abstención en las elecciones políticas.

Confederación Nacional del Trabajo - Asociación Internacional de Trabajadores (CNT-AIT), confederación de sindicatos de carácter anarcosindicalista y federalista. Tiene su origen en 1910 con presencia a lo largo de casi 100 años en Córdoba, especialmente en los pueblos de la Campiña.

En la actualidad cuenta en la ciudad con el Sindicato de Oficios Varios , domiciliado en la Calle Historiador Domínguez Ortiz, 7 local. Muy implicado en los movimientos sociales de la ciudad , realiza actividad sindical en diversos sectores , especialmente los más precarizados. En la provincia cuenta también con un sindicato en Fernán Núñez

Historia

Segunda República
La CNT rechazó la ley de Asociaciones de 8 de abril de 1932 y se negó a acatarla. En un comunicado hecho público el 30 de agosto, el sindicato anarquista declaró:
Primero.- Que no acataremos la ley facciosa del 8 de abril, por ir directamente a la anulación de nuestra táctica y principios, consubstancial con nuestra propia vida y por ende del organismo Confederal.[1]


Dicha ley entró en vigor el 1 de septiembre de 1932.[2]

El 9 de septiembre de 1932 comenzó una huelga de soladores, en el sector de la Construcción. Unos días después, Francisco Egea difundió un comunicado del Sindicato Único de la Industria de Edificación de Córdoba, en el que pedía la comprensión del pueblo de Córdoba a su huelga.[3] El día 15 de septiembre, una asamblea de más de 700 obreros en la sede de calle Jesús María acordó una huelga general de toda la construcción y edificación. Al día siguiente fueron detenidos 3 sindicalistas extremistas: Antonio Torres León, Juan Ruiz Sánchez y Antonio Rosal Palmera.[4] Un día más tarde fue detenido Rafael Molina Mata.[5] El 20 de septiembre se suman al movimiento huelguístico los metalúrgicos, por solidaridad. La prensa calcula que son más de 4.000 los hombres en huelga, quedando paralizadas todas las fábricas y talleres, incluso la Electromecánica y la Constructora naval.[6]

En enero de 1933 el sindicato CNT convocó huelga general en toda España. Fueron famosos los sucesos de Casas Viejas. En Córdoba, en la madrugada del jueves 12 al viernes 13 de enero de 1933 el policía de Vigilancia Felipe Llergo Márquez fue agredido por cuatro individuos en la calle Ángel de Saavedra, cerca de su domicilio. Los asaltantes hicieron 4 disparos sobre el policía, que cayó al suelo herido. Los agresores se dieron a la fuga, no sin antes lanzar unos pasquines excitando a la rebelión.[7] Al día siguiente fueron hallados unos explosivos y una pistola en la calle Alta de Santa Ana.

El viernes 13 de enero de 1933 fueron detenidos 16 sindicalistas reunidos sin permiso de la autoridad en la sede de calle Jesús María. Al frente de la policía iba el agente José Salvago Rocafull y retiraron un cuchillo y dos navajas. Además procedieron a detener a: Manuel Díaz Cobos, Epifanio Jurado López, Manuel Donado González, Antonio Barranco Moya, Félix Baeza Márquez, Andrés Zarza González, Antonio Moreno Llorente, Francisco Fenoy Cuevas, José Serrano Gamero, Rafael Díaz Márquez, Manuel Gálvez Ortega, Antonio Caballero Conesa, José Ors Pérez, Rafael Ramírez de las Casas-Deza Lara y Juan Fernández Urbano.[8] Ese mismo día fue detenido José Vacas, publicista anarquista y colaborador de la revista La Tierra y en Posadas fueron descubiertos unos explosivos. Al día siguiente, el 14 de enero, fue detenido Francisco Porras González, líder anarcosindicalista.[9]

Huelga revolucionaria

Tras el triunfo de las derechas en las Elecciones Generales de 1933, la CNT y la FAI convocan una huelga revolucionaria para los días 9-10-11 de diciembre de 1933. En Córdoba el lunes 11 de diciembre de 1933 se produjo una explosión en la vía del tren, a la altura de los Santos Pintados. Era el inicio de una huelga revolucionaria que tuvo mayores repercusiones en los Sucesos de Bujalance.

Dos días después, en una reunión clandestina de 13 o 14 militantes anarquistas en el Campo de la Verdad, fueron detenidos los sindicalistas Pedro Castro, Antonio Gómez, José María Leiva López y José Lozano Orterga.[10][11] La policía estaba alerta por los graves sucesos de Bujalance. El día 15, las fuerzas del orden bajo la dirección del teniente Luis Galiani detuvieron a otros tres anarquistas y localizaron varias bombas caseras en los Santos Pintados, donde el lunes estalló otra bomba.[12] Esa misma semana fueron detenidos en Fernán Núñez Manuel González Barrera; en Lucena a Juan Liza Cardoso; en El Carpio Ramón Navarro Mejías; en Cañete de las Torres fueron detenidos siete activistas y en Baena se detuvo a Antonio Bernal Caldero, Domingo Bernal Pavón y Antonio Tarifa Ortega.[13][14][15]

El 20 de diciembre el Diario de Córdoba dedicó un amplio reportaje a la detención de los principales autores de la fabricación y colocación de las bombas de Córdoba, "organización terrorista" en palabras del Gobernador. Las primeras pesquisas llevaron a la detención de José Zurita López (a) "el Granadino", de 23 años de edad y natural de Granada, soltero y de oficio cerrajero. Se alojaba en calle Alfaros, número 48 de Córdoba, en la misma casa que algunos guardias de Asalto, por lo que infundió sospechas. Ante el inspector de Vigilancia Antonio Jiménez Abad confesó que había fabricado y escondido unas bombas en la cueva del Cerro del Talquín, frente a la antigua fábrica de plomo. Practicado un registro de la cueva por el suboficial Alcubilla, se encontraron 7 explosivos y el teniente Pita halló otras 14 arandelas de hierro y un pañuelo. Sometido el detenido a un segundo interrogatorio declaró que el día 8 de diciembre, en la sede del Sindicato de la calle Jesús María se ofreció a Antonio López Bravo, Rafael Díaz Lacalle y un tal Rafael Guerra García para cuanto hiciera falta. Al día siguiente Díaz Lacalle le dijo que en las Costanillas le esperaba un tal Zarza, que más tarde lo condujo a la cueva, donde le mostró una caja con cartuchos de dinamita, mechas, tornillos, arandelas y una pistola tipo Campo-Giro. El detenido declaró que en la cueva preparó 9 bombas, no pudiendo terminar más por falta de chapas de hierro. En la sede del sindicato, junto a López Bravo, Díaz Lacalle y Antonio López Conesa cortó tubos de hierro en trozos con un serrucho. Además en una cocinilla del local había metralla, arandelas y trozos de chapa. La policía detuvo a Antonio López Bravo y a Antonio López Conesa, que confirmaron las pesquisas e implicaron a un tal "Peteneras". Los agentes Velasco, Hernández y Lafuente procedieron a la detención de Rafael Guerra García, con domicilio en calle Santa Inés, presunto autor del lanzamiento de la bomba al Círculo Mercantil. Confesó que Zarza, que vivía en calle Alvar Rodríguez, le entregó una bomba que él lanzó sobre el Círculo Mercantil.[16] Al día siguiente fue detenido Díaz Lacalle en Belmez.[17] Rafael Muñoz Nadales (a) "Peteneras" se entregó en Córdoba el día 22 de diciembre.[18]

Ideología

Cree en otra forma de gobernar, más libre y cercana, en la que todos cuenten de forma efectiva en la toma de decisiones oponiéndose a pensar que estamos en el mejor de los mundos posibles, y día a día, intenta organizarse para pensar, difundir, crear y buscar de una forma independiente y horizontal, formas de emancipación personal y colectiva.

En Córdoba viene realizando, con alguna interrupción desde 1995, las Jornadas Libertarias, que intentan a través de conferencias, proyecciones, mesas redondas etc. traer algo de aire al viciado ambiente impuesto por los medios de comunicación y la política oficial.

Referencias

  1. Remitido, en el diario La Voz, 1 de septiembre de 1932, pág. 5.
  2. Notas del Gobierno, en el diario La Voz, 2 de septiembre de 1932, pág. 5.
  3. Sindicato Único de la Industria de Edificación de Córdoba. A la opinión, en el diario La Voz, 13 de septiembre de 1932, pág. 5.
  4. Huelga. Es general en los ramos de Construcción y Edificación, en el diario La Voz, 16 de septiembre de 1932, pág. 6.
  5. La huelga del ramo de la construcción. Continúa en el mismo estado, en el diario La Voz, 17 de septiembre de 1932, pág. 4.
  6. La huelga del ramo de Construcción. Por solidaridad se suman al movimiento los metalúrgicos, en el diario La Voz, 20 de septiembre de 1932, pág. 5.
  7. Cuatro desconocidos hacen objeto de una agresión a un guardia, en el diario La Voz, 13 de enero de 1933, pág. 13.
  8. Detención de diez y seis personas, en el diario La Voz, 13 de enero de 1933, pág. 13.
  9. Notas del Gobierno, en el diario La Voz, 14 de enero de 1933, pág. 5.
  10. Gacetillas. Reunión clandestina], en el Diario de Córdoba, 14 de diciembre de 1933, pág. 2.
  11. Detención de un extremista, en el Diario de Córdoba, 24 de diciembre de 1933, pág. 2.
  12. Tres detenciones importantes y hallazgo de bombas en los Santos Pintados, en el Diario de Córdoba, 16 de diciembre de 1933, pág. 2.
  13. De la provincia. Dos detenciones, en el Diario de Córdoba, domingo 17 de diciembre de 1933, pág. 1.
  14. Gobierno Civil. Manifestaciones del Gobernador Civil, en el Diario de Córdoba, 21 de diciembre de 1933, pág. 1.
  15. De la provincia. Detención de reclamados, en el Diario de Córdoba, 22 de diciembre de 1933, pág. 1.
  16. Descubrimiento y captura de los autores de la fabricación y colocación de bombas en Córdoba, en el Diario de Córdoba, miércoles 20 de diciembre de 1933, pág. 1.
  17. Gobierno Civil. Manifestaciones del Gobernador Civil, en el Diario de Córdoba, 21 de diciembre de 1933, pág. 1.
  18. Gacetillas. De la fabricación de bombas, en el Diario de Córdoba, 23 de diciembre de 1933, pág. 2.

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