Francisco Bravo Antibón

Francisco Bravo Antibón

Nace en Córdoba el 29 de mayo de 1942 en la calle Conde de Arenales del barrio de San Andrés. Comenzó sus estudios primarios en el colegio de los Hermanos Maristas, hace el bachiller en el I.E.S. Luis de Góngora de la plaza de las Tendillas, sin terminarlo pasó a la Universidad Laboral donde hace una especialidad eléctrica. Llegado el momento de iniciar un trabajo se presenta a una plaza del Banco Central donde desarrolló su servicio durante años para salir del mismo a ocupar la gerencia de una acreditada empresa comercial.

Su historial hay que buscarlo en el mundo del toro. Desde muy pequeño sintió la vocación taurina sin que nadie le indicara nada sobre ésta, pues no estaba envuelto por un ambiente relacionado con la tauromaquia. Viendo su madre la inclinación que tenía por todo lo taurino, le reveló un secreto que él ignoraba, diciéndole que sus tíos maternos se habían iniciado en este mundo. Éstos llegaron a participar en corridas como becerristas o banderilleros, teniendo por nombre los Hermanos Antibón García-Sotoca. La noticia le motivo aún más, estando en algunas tientas animado por el modesto apoderado Rafael Jiménez, y así fue preparándose para comenzar una carrera que la llevaba inscrita en los genes. Cuando le piden a su padre la autorización para actuar en una becerrada, éste se niega a firmarla y Francisco todo obediente siguió el consejo de su progenitor dejando los inicios toreros para continuar los estudios.

Llevando el gusanillo de los toros desde su niñez, éste le induce a desarrollar otra faceta innata en él, como ser escritor taurino en particular y de personajes del mundo artístico en general, así como cualquier otro nombre de corte popular que tuviera una clara referencia hacia Córdoba. Le presentan a José María Gaona "Tío Caniyitas", poeta y crítico en tauromaquia y éste le anima a que siga por el camino emprendido. Autodidacta en la pluma, se especializa en temas que contemplan muy diversos matices, desde toreros famosos cordobeses como Rafael Molina Sánchez "Lagartijo", Rafael González Madrid "Machaquito", José María Martorell, Manuel Calero "Calerito", Manuel Benítez "El Cordobés", Alfonso González Olmo "Chiquilín", Rafael Jiménez González "Chiquilín" , así como resaltar a subalternos que tuvieron gran importancia en los ruedos, pero menos difusión en los medios de comunicación, como fueron los "toreros de plata", (así llamados por Francico Antibón) Paco Sánchez Saco, Julio Sánchez, “El Niño de las Monjas”, "El Niño del Brillante”, Alfonso Castillero, los “Zuritos”, los “Sánchez Saco”, el piquero Mazzantini y un largo etc. A muchos les hizo entrevistas, reportajes o artículos, siempre con la intención de elevar su arte, valorando sobre todo el ser figuras que han llevado a otros lugares el nombre de Córdoba.

Ha publicado en diferentes medios sobre personajes como: Antonio Gala, Rosa Aguilar, Miguel Salcedo Hierro, Francisco Laguna, José Toscano Chaparro, Tico Medina, Antonio Losada Campos, José María Alvariño, Pablo García Baena, José Luis Sánchez Garrido, etc.

Sus trabajos no quedan únicamente en escribir, sino que es un investigador taurino que pretende llegar a las raíces de los acontecimientos que se propone dar a conocer, dejando constancia histórica de los hechos. Sobre todo cuando han sido datos poco conocidos. Se exponen seguidamente dos casos que aparentemente tiene poca relevancia en si, pero han dado luz a dudas surgidas en su momento. Todo este trabajo está hecho con rigor y atendiendo a documentos que los acreditan:

Fue el caso del torero Francisco Gutiérrez "Serranito de Córdoba" que siempre hubo duda de cual era su segundo apellido. Unos decían que Serrano, otros que no. Francisco Bravo Antibón tras rastrear por muy diversos lugares y archivos encontró una punta de familia que le llevó a descubrir su verdadero apellido, que era Martínez.

Otra investigación realizada, fue el rumor extendido por Córdoba de que al morir Rafael Molina Sánchez "Lagartijo" le había tocado la lotería en un número suscrito y que el billete premiado lo llevaba en su traje de mortaja. Francisco averiguó cual era dicho número, y con paciencia meticulosa investigó en el Patronato de Loterías de Madrid, descubriendo que el rumor carecía de fundamento.

No se puede decir que fuera apoderado, pero sí apadrinó a Manolo Cañero, un chaval de Cabra que lo introdujo en los ambientes taurinos de la capital por el solo hecho de animar a una persona que pretendía con ilusión seguir el arte de “Cúchares”.

Paco Bravo, como coloquialmente se le nombra, es un hombre modesto y sencillo que no tiene ningún interés en alcanzar honores, sólo le mueve su vocación y amor por todo lo cordobés. Por este motivo, es bien conocido en los ambientes taurinos y en los periodísticos, siendo respetado y valorado por todos los que lo conocen. Comenta, que los mejores reconocimientos y homenajes recibidos, son aquellos que provienen de personas desconocidas al llamarlo felicitándolo y dándoles las gracias por algo que ha plasmado en sus escritos.

Realizaciones, trabajos y aportaciones

Formó parte del equipo coordinador de la revista “NORTE Y SUR”, editada y difundida en la Universidad Laboral de Córdoba.

Interviene con sus artículos o semblanzas en la revista taurina y diarios siguientes “El CALIFA”, “TOREROS DE CORDOBA”, “PREGÓN DE LA FERIA DE CÓRDOBA, BOLETÍN DE LOTERÍAS Y TOROS, LA INFORMACIÓN, LA TRIBUNA, TENDIDO-1 de Jaén, EL TAURINO de Yecla (Murcia), HOMENAJE A CÓRDOBA Y SUS TOREROS que patrocina Onda–Cero/Radio, CUADERNO TAURINO DE ESCUCHA Teruel, LA INFORMACIÓN.

Colaborador en la Revista Cultural Aires de Córdoba, en el Diario Córdoba publicó artículos sobre decoración ambiental.

Presentación en el Palacio de Viana del primer “TROFEO–LAGARTIJO”, incluida conferencia sobre el tema “LARGA CORDOBESA”, Charla coloquio en la peña de JOSÉ LUÍS VILLAFUERTE, conferencia recordando la figura de “LAGARTIJO” en la peña Taurina “Chiquilín”.

Realiza la biografía del diestro JOSÉ LUÍS VILLAFUERTE.

En 1999, formó parte del Grupo-Jurado, que decidió el nombramiento del “CINCO CORDOBESES DEL SIGLO XX”.

En el volumen IV de la obra: “TAUROMAQUIA DE MANOLETE", su autor Paco Laguna, le incluye un artículo titulado “EL TOREO DE PERFIL”, así mismo interviene con un trabajo de opinión, en el libro “V CALIFA” que José Toscano Chaparro, escribió sobre la figura de Manuel Benítez "El Cordobés".